Hoy termina 2021, el segundo año de pandemia, y lo hace en una situación muy distinta a la de finales de 2020, hablando en términos de Covid.

Con los datos que publicó ayer el Ministerio de Sanidad en una mano y los que difundió hace justo un año en la otra, la comparativa es la siguiente: el 30 de diciembre de 2020 la incidencia acumulada era de 265 casos por cada 100.000 en los últimos 14 días, una cifra casi siete veces menor que la que se registraba ayer, con 1.775 casos de incidencia acumulada (267 más que el miércoles).

2022 también será pandémico: se prevén ondas cada vez más suaves sin excluir otra nueva variante que lo cambie todo

 De hecho, ya no queda ninguna comunidad autónoma que esté por debajo de los 1.000 casos de incidencia. Además, una de ellas, Navarra, se acerca peligrosamente a los 4.000 (con 3.810 casos) y varias a los 3.000 (La Rioja, con 2.861, y País Vasco, con 2.731).

Prosiguiendo con otro de los indicadores más importantes, el de contagios diarios, la diferencia también es sustancial. Tal día como hoy de 2020, los titulares de los medios hablaban de 16.716 nuevos contagios; hoy, sin embargo, esta cifra es de 161.688, basándonos en el informe que publicó ayer por la tarde el departamento que dirige Carolina Darias.

Así, la de ayer jueves fue otra jornada de cifras de récord en una semana que no ha dado un respiro, después de que el miércoles se superase la barrera de los 100.000 casos.

Este balance, hasta ahora considerablemente más negativo que el de 2020, cambia radicalmente de perspectiva cuando el dato que se compara es el de muertes, el más importante de todos. Hace un año, hoy se estaba hablando de 247 nuevos decesos.

Esta diferencia tan positiva es consecuencia de las altas cifras de vacunación en España, donde casi el 80% de la población ha recibido la pauta completa contra la Covid. Y aunque la nueva variante ómicron ha dejado patente que es capaz de sortear los anticuerpos de la vacuna –de ahí que se estén poniendo dosis de refuerzo–, los sueros también han demostrado lo importantes que son a la hora de prevenir un cuadro grave de Covid.

Esta ventaja para la salud que supone estar vacunado también se refleja en el número de personas que hay ingresadas actualmente (teniendo en cuenta el aluvión sin precedentes de contagios que se está produciendo) y las que había hace un año (cuando la expansión del virus era mucho más lenta).

Así, a fecha de ayer había 10.768 personas ingresadas en planta frente a las 11.905 que lo estuvieron el 30 de diciembre del año pasado, recordando que tanto la incidencia como el número de contagios era mucho menor por aquel entonces que el actual.

Lo mismo ocurre en las unidades de cuidados intensivos (UCI): ayer 1.803 pacientes luchaban por su vida en las UCI, menos que los 2.035 que lo hacían un año antes.

Pese a todo, el aumento exponencial de contagios que se está produciendo por la variante ómicron está pasando factura, y por eso la ocupación en los hospitales continúa in crescendo, aunque muy lentamente: ayer se notificaron 357 nuevos ingresos en planta y 30 nuevos en UCI, con unas ocupaciones a nivel nacional del 8,81% y 19,42%, respectivamente (0,3 décimas más respecto a la jornada anterior en ambos casos).